Seguros educativos

Seguros educativos

Una de las mayores preocupaciones de los padres es la educación de sus hijos. Existe una forma de asegurar los recursos suficientes para que concluyan un grado superior, se trata de los seguros educativos, ¿son una buena opción?

La dinámica social está en constate evolución, cada sociedad tiene mecanismos de promoción o escalafón que permiten tener un orden social en el que la técnica o el estudio son determinantes para acceder a cierto nivel de vida; esto quiere decir, idealmente, que el conocimiento o la especialización de cada individuo le permitirá aspirar a puestos importantes.

Esta es la razón por la que actualmente el saber es susceptible de ser ofertado como mercancía. En el contexto moderno, una educación de “calidad” tiene un costo importante que se debe prever, ya que en ella está puesta la esperanza del desarrollo económico y social que ha sido prometido durante décadas. Es precisamente bajo estas circunstancias que nace una herramienta capaz de garantizar que los miembros una familia tengan la oportunidad de prepararse de la mejor manera: el seguro educativo.

SEGURO EDUCATIVO

En un país como México, donde un porcentaje muy bajo de los estudiantes que inician la educación básica terminan estudios superiores o técnicos, en gran parte por la falta de recursos económicos, toma gran importancia prever cómo se financiará la educación de los hijos, y es de esta necesidad que toman relevancia los seguros educativos.

Habrá siempre quienes piensen que existe la opción de la educación pública, pero hasta esta tiene un costo acumulado de varios miles de pesos en los casi veinte años de educación, del preescolar hasta la finalización de los estudios de nivel superior; es menester, para una familia, hacer cuentas de todos los gastos que conlleva la etapa formativa de los hijos.

La figura del seguro es una parte muy importante del desarrollo de los países, debido al impacto socioeconómico derivado de su operación. Hay que recordar que un seguro no busca reponer el valor de los bienes o servicios que tienen una probabilidad de perderse en su totalidad, sino servir como un apoyo para que en caso de ocurrir el supuesto el golpe a las finanzas sea menor.

No se puede señalar con exactitud el momento en que se originaron los seguros educativos, en un principio eran sólo un accesorio de los seguros de vida que poco a poco se fueron ofertando de manera individual para cubrir la necesidad que existe en el mercado de prever los gastos derivados de la educación.

Al seguro educativo o escolar lo podemos definir como un instrumento financiero que constituye, además de un ahorro, una garantía para la educación de los hijos, ya que aunque su finalidad es tener un capital que permita solventar los costos de la escuela, la institución con la que se contrate debe pagar la suma asegurada aunque no sea destinada para gastos educativos.

Al momento de contratar un seguro educativo el padre, madre o tutor del menor se compromete a pagar una cantidad mensual, semestral o anual, durante un tiempo determinado, por la que el beneficiario recibirá un monto para continuar con sus estudios al cumplir 15, 18 o 22 años (límites de edad fijados por la mayoría de las aseguradoras, aunque puede haber más opciones en el mercado).

Los componentes del Seguro Educativo pueden ser:

Ahorro. Son las aportaciones periódicas denominadas primas de ahorro para alcanzar la suma asegurada.

Seguro. Cubre el riesgo contra invalidez o fallecimiento de los padres o tutores, el cual podría afectar el cumplimiento de la meta de ahorro.

Inversión. El dinero acumulado genera un rendimiento y se capitaliza con el tiempo para que no pierda su poder adquisitivo.

Un seguro educativo se puede contratar en tres modalidades: moneda nacional, dólares o UDIS (Unidades de Inversión); asimismo la indemnización se puede recibir en un pago único o contratando un fideicomiso en administración que periódicamente se encargará del pago de colegiaturas y el costo de manutención, mientras el capital permanece invertido.

¿UNA OPCIÓN VIABLE?

Los seguros educativos son una buena alternativa porque funcionan como un aval para la educación del menor, al garantizar el pago de colegiaturas, además de que ofrece la oportunidad de contratar coberturas adicionales como fallecimiento o invalidez total y permanente.

En el seguro educativo, el dinero que recibirá el menor asegurado se encuentra garantizado, ya que la compañía se compromete a seguir pagando el seguro hasta que el menor alcance, dependiendo del plan, la edad límite establecida, término que indica el momento en que la aseguradora entregará el dinero al beneficiario.

A la hora de decidir qué seguro es el que se debe de elegir es muy importante que se tomen en cuenta todas las variables personales (inscripciones, materiales, libros, computadoras, etcétera) ya que un plan que es bueno para una persona o familia no necesariamente es una buena opción para otra.

Teniendo a la mano los cálculos particulares se deberá programar un plan de pagos, basándose en un control de ingresos y egresos para determinar la capacidad de pago. Si esta no es suficiente, se pueden buscar opciones como solicitar un aumento de salario, cambio de empleo, reducir gastos o buscar trabajos el fin de semana, entre otras.

A los padres de familia que están por contratar un seguro de este tipo, se les recomienda, generalmente, consultar a asesores financieros independientes para que les orienten de forma más objetiva sobre los productos que existen en el mercado.

LA MEJOR OPCIÓN

Según datos de la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), en México las primas anuales más caras pueden oscilar entre los 20 y los 30 mil pesos por un seguro a 15 años para un menor de tres años que recibiría a los 18 años cerca de 480 mil pesos.

El pasado mes de diciembre el organismo dio a conocer mediante un comunicado las calificaciones que obtuvieron las aseguradoras en el producto Seguro Educativo, durante el periodo de enero a septiembre de 2014.

De acuerdo con los datos del Buró de Entidades Financieras, de 12 aseguradoras que ofrecen el producto en México, seis resultaron reprobadas en su desempeño.

Con una calificación de 2.58, Seguros Monterrey obtuvo la peor calificación, seguida por Allianz con 3.65, AXA con 4.39, Insignia Life con 4.40, Inbursa Seguros con 5.50 y General de Seguros con 5.96.

GNP Seguros resultó, en cambio, se posicionó como la más alta de la medición al obtener una calificación de 7.68, seguida de Seguros Atlas con 7.36, Mapfre México con 7.13, MetLife con 7.09, HSBC con 6.50 y Seguros Banorte con 6.03.

Aunque hay que considerar que si bien es cierto que GNP Seguros obtuvo la calificación más alta en esta evaluación, también fue la aseguradora que mayor número de reclamaciones obtuvo con un total de 81, y con un índice de reclamación por cada 10 mil siniestros de 70.650; le sigue MetLife con 77 reclamaciones y con un índice de reclamación de 13.078; posteriormente se encuentra Seguros Monterrey que obtuvo 51 reclamaciones, y un índice de reclamación de 91.267.

ANTES DE DECIDIR

Si se está pensando en contratar un seguro educativo, es necesario tomar algunas consideraciones. En primer lugar se debe tomar consciencia del compromiso que implica celebrar un contrato de esta naturaleza.

Es necesario evaluar las finanzas familiares, pues el seguro educativo representa una inversión que durará varios años, según el plan a contratar, y en la mayoría de los casos, si por alguna eventualidad, como falta de fondos o de cualquier otra índole, se cancela la póliza es probable que no se reciba el total de la suma asegurada, sino únicamente el ahorro que se lleve, ya sea el valor nominal de las UDIS o la suma en dólares.

Algunas aseguradoras brindan financiamiento o en su caso se descuenta de la suma asegurada que se recibirá al final del periodo contratado si no se paga la prima correspondiente.

Andres y Cia Seguros y Fianzas  toma este articulo de El Siglo de Torreón en su edición del dia Domingo 15 de Febrero del 2015  http://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/1086989.seguros-educativos.html para informar a sus clientes y seguidores.